No se encuentran nuestros pies

Caminamos juntos toda una vida para llegar a metas distintas y ahora somos campeones de ligas paralelas.

Tú conquistaste el cielo, yo el mar.
Pero ambos nos convertimos en reyes de nuestro mundo.

Ahora me pregunto:
¿Por qué no quisiste ser mi reina?

1 comentario:

Gema dijo...

Porque las princesas siempre menosprecian a los héroes. Mientras éstos protegían su castillo y a toda ella. También los héroes menospreciaban otros empleos ofuscados en reinar, cuando esa no es su función ni destino